 |
| Lcda.María Celeste Depablos Docente de PYDE |
Este tema era casi una excepción hace 4 o 5 décadas, en los actuales momentos es casi una regla porque se ha expandido en niveles tan críticos en todo el mundo que ya es un problema de salud pública y emergencia social. Esta situación se ha agravado para una sociedad que divide y fragmenta sobre todo por acción no controlada de los medios masivos de comunicación, especialmente la televisión y las llamadas redes sociales. La televisión donde predomina el sexo, la pornografía y la violencia que manipula la conciencia; haciendo prevalecer los instintos y las pasiones especialmente con la publicidad cuyos slogans repetidos penetran en el pensamiento de las adolescentes estimulando conductas sexuales compulsivas que estos no pueden dominar. Con un lenguaje encantador buscan el placer, estimulan la actividad sexual prematura en cuñas, fotos, imágenes y música, con todo el aparataje mediático y publicitario al servicio de la sexualidad, se suman las llamadas telenovelas centradas en aventuras amorosas y sexuales que modelan conductas a los adolescentes para dominarlos, controlarlos e imponerles ese orden de explotación a través del consumismo desenfrenado. Ante esa realidad la educación escolar es insuficiente. El sistema educativo no tiene capacidad para neutralizar la ofensiva comunicacional. Tampoco la familia tiene capacidad de respuesta y ha perdido toda ascendencia y posibilidad de persuadir a los jóvenes, de que el sexo va acompañado de responsabilidad y que requiere una edad adecuada para ejercerlo.
La sociedad debe organizarse, los comité de usuarios de los medios y redes sociales, son los únicos que en asamblea de ciudadanos vinculantes, pueden frenar, el negocio del sexo, pornografía y violencia en estos medios de comunicación. Debe legislarse en esta materia con una campaña masiva por una sexualidad responsable. Sólo la sociedad unidad puede frenar el Embarazo en Adolescentes.
Lcda. María Celeste Depablos
Foto: Lcda. Lolimar Jiménez (Docente C.R.A. )
